lunes, 10 de enero de 2011

Acerca del Programa de Transición y la huelga europea (Daniel Guerra)

Compañeros, han pasado las fiestas navideñas, donde las familias y amigos se reúnen y hablan de la vida cotidiana, de sus experiencias, opiniones, y tienden a debatir de lo divino y lo humano alrededor de la mesa. Se podría decir que lo que se habla en esos hogares en muchos casos es un reflejo del estado de consciencia del pueblo, y que además puede servir de inspiración para un artículo, como éste que os enlazo.

http://internacional5.blogspot.com/2011/01/socialismo-o-barbarie-el-huevo-de-la.html

Dicho artículo viene acompañado de un vídeo sobre una charla en una Asociación de Inmigrantes en la que el doctor Arcadi Oliveres, economista y profesor de la Universidad de Barcelona, ofrece interesantes y reveladores datos sobre los causantes de la pobreza en el mundo. Este doctor, a pesar de la valiosa información que difunde, extrae como conclusión que la solución es luchar contra el fraude fiscal. En fin, nosotros ya sabemos que el problema es el capitalismo, y el fraude fiscal de los poderosos no es más que una de sus inherentes excrecencias. Así pues, que los doctores expertos en recabar datos nos los ofrezcan, y nosotros ya tomaremos las conclusiones que nuestro instinto de clase nos indica.


Lo que destaco sobre el vídeo y el artículo, es que una vez que se han colgado conjuntamente en el muro del grupo de facebook, se han producido interesantes debates en los que incluso se ha relacionado el Programa de Transición de León Trotsky con la propuesta de una huelga general europea, una consigna que llevamos defendiendo desde que saltara la chispa en Grecia.

En el debate que el grupo de la V Internacional mantenemos desde hace meses sobre la huelga europea, (unido a la agitación en su defensa en todas las plataformas, sindicatos, partidos, comités, etc.) ha habido quien se ha mostrado contrario a dicha propuesta por creerla inviable, por parecerle que la clase obrera europea no está lo suficiente avanzada o madura para llevarla a cabo. No es eso lo que clamaron en junio los trabajadores griegos frente a la Acrópolis y el Partenón en una imagen que fue aplaudida por los trabajadores del mundo entero. Tampoco es lo que nos indicaba el calendario de luchas de meses anteriores, en los que la agenda estaba tan apretada que en ocasiones coincidían varios países en huelga, por lo que la huelga europea casi se produce sin que fuera convocada, y tampoco es lo que pudimos constatar el pasado 29 de septiembre, donde efectivamente se produjo una lucha coordinada a nivel europeo que traspasó las fronteras continentales.

http://internacional5.blogspot.com/2010/10/29-s-el-triunfo-del-internacionalismo.html

Sin embargo, las razones para proponer una consigna, forzosamente han de ir un poco más allá del nivel de conciencia actual de la clase trabajadora, aunque pudiéndose enlazar con sus necesidades inmediatas y las luchas que están llevando a cabo. Como decía Trotsky en el Programa de Transición: "Nuestras tareas no dependen de la conciencia de los trabajadores. La tarea consiste en desarrollar su conciencia. Esto es lo que el programa debe formular y mostrar a los obreros avanzados"

De momento estas luchas se están dado país a país con la excepción ya mencionada, aunque en realidad nos estamos enfrentando a los efectos de un sistema económico que es global y a los dictados de unos organismos internacionales en defensa de los intereses de los mercados, como el FMI y la UE. Algo que la mayoría de trabajadores, si no lo saben, al menos lo intuyen, y de no comenzar a internacionalizar las luchas, éstas pueden comenzar a perder gas en algunos países debido a un sentimiento prematuro de derrota, ante la certera suposición de no poder combatir en un solo país algo que supera sus fronteras nacionales.Con las consecuencias que eso acarrearía. Así pues, la huelga europea no sólo es viable, sino imprescindible para las conquistas de las reivindicaciones inmediatas de los trabajadores. Sólo una respuesta globalizada es la solución.

El Programa de Transición se elaboró para explicar cómo tratar de acercar a los trabajadores, en su lucha diaria y elevando su nivel de conciencia, a la conclusión de que es necesario derribar el capitalismo. Dicho Programa declara que el punto de partida de un revolucionario debe ser el nivel real de la conciencia de los trabajadores, que no es revolucionario en todos los momentos ni lugares, y relacionar el movimiento necesariamente inacabado y poco claro de los trabajadores con el programa acabado y científico del marxismo. “Es necesario ayudar a las masas a que en sus luchas cotidianas hallen el puente que une sus reivindicaciones actuales con el programa de la revolución socialista. Este puente debe componerse de un conjunto de reivindicaciones transitorias, basadas en las condiciones y en la conciencia actual de amplios sectores de la clase obrera para hacerlas desembocar en una única conclusión final: la toma del poder por el proletariado.”

De esta manera, si la huelga general es una buena escuela para nuestra clase en la que demostramos, más a nosotros mismos que a nadie, quiénes son los auténticos amos del mundo, los que tienen en sus manos las palancas, botones, teclados, mandos, llaves de paso, torres de control…. que ponen en marcha o detienen el mundo si así lo decidimos, poniendo de manifiesto cuál es nuestro poder para impedir que nos aplasten y para cambiar las cosas ¿No es por lo tanto, la defensa de la huelga general europea, una consigna que constituye también por sí misma una forma de elevar el nivel de conciencia de los trabajadores? ¿Acaso no es también una propuesta que nos sirve para explicar que el problema no es del gobierno de este país o de aquél otro, sino del capitalismo? El capitalismo es internacional, entonces ¿Qué hacemos combatiéndolo localmente? Y la conclusión que le sigue a estas preguntas, una vez hemos identificado al verdadero enemigo, que está muy por encima de los Zapatero, Merkel o Sarkozy, es que ya sabemos qué es lo que hay que derribar, por lo que la huelga debe ir dotada con la defensa de un programa auténticamente socialista, debatido y votado en comités de lucha, de huelga, asambleas, plataformas, sindicatos, partidos, corrientes... No se trata de inventarnos una huelga europea de la nada, sino de luchar por convertir las jornadas de lucha europea, con con paros parciales, protestas, e incluso huelgas, que ya se están produciendo convocadas por el CES en el continente, en una Huelga General Europea, por los intereses de los trabajadores de todos los pueblos de Europa a corto, medio y largo plazo. Los próximos años van a ser decisivos para el movimiento obrero, no es momento para vacilaciones.

En resumidas cuentas ¿No es por lo tanto la Huelga General Europea, en el contexto actual, con toda Europa en pie de guerra, una consiga propia del Programa de Transición?

Salud y Revolución
Daniel Guerra